Ataque de Pánico:

Así es comúnmente llamado un conjunto de síntomas, que aparecen repentinamente y se caracterizan por su excesiva intensidad.

El paciente sufre alteraciones en el ritmo cardíaco: taquicardias, hipertensión, espasmos. Alteraciones en la respiración, sensación de falta de aire, sudoración fuerte, temblores, a veces nauseas.

Los pacientes que sufren estos estados, se encuentran invadidos por angustia y miedo. Aparecen asociaciones de ideas de peligro y muerte. Es muy frecuente la idea y el impulso de escapar, y ponerse a salvo.  El resultado frecuente es un camino de auto-limitaciones, restricciones en su conducta, evadir viajes, compromisos.

En algunos casos restringen al máximo su vida.

Pero estos intentos son parte del mismo problema que no aportan ninguna solución y agravan el cuadro.

Cuando el paciente no comienza un tratamiento los síntomas no desaparecen, por si solos. He  visto pacientes que intentaron sobrellevar esto con auto-limitaciones de su propia vida, alterando sus actividades laborales, su vida social. Esto termina afectando la economía, y los afectos. Pacientes que llegan con años de sufrimiento, de “estos males”. Algunos pacientes habiendo concurrido a médicos clínicos, o especialidades que no son propias.

 

Tratamiento:

 

Es importante el comienzo de un tratamiento adecuado lo antes posible.

En el mismo como primer paso hay que hacer una correcta evaluación, diagnosticando y determinando los pasos a seguir en el proceso de curación. Cuando el paciente no puede realizar tareas mínimas para subsistir, como trabajar, viajar, hay que evaluar la posibilidad de medicación, por medio de un especialista en la materia. No es lo mismo un cardiólogo o un médico clínico que un buen psiquiatra. Cuando un psiquiatra trabaja bien, sabe que con la medicación el paciente no se cura, solo se alivia lo suficiente como para que no discontinúe la vida. Por lo tanto sabe que la medicación es transitoria, y se debe tender a sacarla.

El verdadero proceso de curación y superación definitiva, se dará con un  buen tratamiento psicoanalítico. El psicoanálisis es la única disciplina que se especializa en el estudio, y tratamiento de las formaciones del inconciente: “los síntomas”.

Los pacientes que inician tratamiento empiezan un proceso de cura que varía de acuerdo a la particularidad de cada caso.

Al poco tiempo comienza cierto alivio: a veces luego de las primeras entrevistas, ya se ve una importante mejoría.  En el proceso que ceden algunos temores, se recuperan espacios y actividades. Se va recuperando la vida con el proceso de cura.

Los únicos pacientes que no mejoran son los que no hacen un adecuado tratamiento.

 

Lic. Claudio Colombatti

Psicoanalista